miércoles, 28 de octubre de 2009

Primal Fear: 24 de octubre de 2009

Una vez más otro concierto: a destrozarme los oídos, las rodillas, la espalda y sudar. Pero sobre todo disfrutar de buen heavy metal. Este ha sido uno de los conciertos que más me han ilusionado este año, porque Primal Fear es de mis grupos favoritos y por fin han dado un concierto al que he podido ir. Es verdad que este año he visto a Metallica y a los Judas, pero ya los había visto a ambos el año pasado, y ver a un grupo que te gusta por primera vez es muy motivante. Bueno, aquí está la entrada:

Tenía mis recelos con el sitio, la sala Heineken (antes llamada sala Arena). En el 2005 fui allí al concierto de Jorge Salán y la acústica no fue muy buena que digamos, la batería retumbaba muchísimo. Pero afortunadamente parecen haber resuelto esos problemas y el sonido fue bastante bueno. De nuevo volví a tener suerte y no tuve que ir solo, me acompañó mi amiga Kristina, que tenía curiosidad por ir a un concierto heavy 100% por primera vez. Y según me dijo acabó encantada.

En la entrada ponía que la apertura de puertas sería a las 7. Cuando llegué sobre las 6:30 la cola era bastante pequeña, me sorprendió que hubiera tan poca gente. Nada más entrar, a las 7 en punto, los primeros teloneros ya estaban listos para tocar a pesar de que en la entrada ponía que empezarían a las 7:30. Pero no esperaron, en cuanto entraron las primeras 30 personas o así empezaron a dar caña. Me enteré de que el grupo se llamaba Jaded Heart porque lo leí en el telón del fondo, ya que en la entrada ponía “Artista Invitado” y en internet no vi ningún sitio en el que pusiera quiénes eran los acompañantes de Brainstorm y Primal Fear.

La formación se componía del cantante, el batería, el bajista, un guitarrista y un teclista. El grupo no estuvo nada mal, estuvieron muy motivados y muy cómplices con el escaso público en ese momento. Es lo bueno de que no haya foso, te puedes poner tan cerca que les puedes tocar. Muchas veces nos dieron la mano. Pero también hay inconvenientes con la ausencia de foso: cuando llevaban un par de canciones aparecieron los “jodones”, es decir, los fotógrafos oficiales de los medios heavys que empezaron a surgir de todas partes y a molestar para hacerse con un buen sitio para hacer fotos. El que me tocó aguantar a mí, el más alto de todos, era además bastante malo. Se me plantó delante y vi que casi todas las fotos que hacía le salían desenfocadas porque casi nunca usaba el flash.

Volviendo al grupo, en unos 20 minutos terminaron su actuación y se pusieron a desmontar ellos mismos el equipo (ah, estos grupos humildes…). Cuando se llevaron el bombo pude ver que en una de las caras estaba pegado el setlist y habían tachado 3 temas. No entendí a qué vinieron tantas prisas: empezaron media hora antes y quitaron 3 canciones.

En 10 minutos comenzó la actuación de Brainstorm puesto que su equipo estaba prácticamente preparado en su totalidad detrás del de Jaded Heart. 1 hora de adelanto con respecto al horario previsto. Me empecé a oler el motivo y no me equivoqué, pero vayamos con la actuación de Brainstorm.

Antes del concierto me escuché algunas canciones del último disco y me pareció que estaban bastante bien. Y la actuación también me gustó. De las canciones antiguas he de decir que no las conocía, pero me parecieron todas muy parecidas entre sí. En cambio las nuevas me parecieron más originales y variadas. El cantante, que por cierto se parecía un montón a Eric Cantona con melenas, superó en complicidad al anterior porque se bajó con nosotros a cantar y estuvo moneando un rato por la pista durante una canción casi entera, un detalle muy original. También nos estuvo vacilando un rato con que si España iba a ganar el mundial o lo iban a ganar ellos (son alemanes) y también con que si la gente que fue a verles en el concierto de Barcelona gritaban más que nosotros (la rivalidad Madrid-Barcelona es mundialmente conocida).

Terminaron entre las 8:15 y las 8:30, y he aquí el motivo del adelanto de horarios: tenían que desmontar completamente el equipo de Brainstorm y montar el de Primal Fear. En efecto cumplieron el horario, porque tardaron una hora entera y Primal Fear arrancó a las 9:30. Qué pesadez el esperar una hora entera, menos mal que no estaba solo.

Me esperaba que para Primal Fear se terminara de llenar la sala pero no fue así, estuvimos bastante cómodos y amplios, no creo que se superaran las 300 personas. Es raro ver cómo un grupo tan bueno congrega tan poca gente, pero bueno, es la demostración de que en el heavy metal los grupos relativamente nuevos no se comen un colín por buenos que sean, las vacas sagradas son las vacas sagradas.

Pero bueno, vayamos con su actuación, que calificaré con una palabra: ENORME. Igual que Ralf Scheepers, el cantante. Para tener 44 tacos está más cachas que Silvester Stallone en su época de gloria. La verdad es que impresiona verle en directo, y más a la distancia a la que yo lo tenía. Los demás parecían unos mequetrefes a su lado, jaja. Y que conste que no soy gay.

Pero centrándonos en lo musical, he de decir que ha sido de los conciertos que más me han gustado, la interpretación de todas las canciones me pareció perfecta, no tengo ni un solo pero. La voz de Ralf es para caerse de espaldas, la reencarnación de Haldford si estuviera muerto, pero con 15 años menos y 20 kilos más de músculo. Henny Wolter y Alexander Beyrodt son dos pedazos de guitarristas, impresionantes. Mat Sinner no es sólo un gran bajista, también tiene una pedazo de voz, hace los coros e incluso trozos en los que canta él solo. De Randy Black, como estaba bastante oculto tras la batería poco puedo decir, pero si no me llamó la atención es porque no cometió ningún fallo.

Esto fue lo que tocaron:

  1. Before the Devil Knows You're Dead (Intro)
  2. Under the Radar
  3. Battalions of Hate
  4. Killbound
  5. Nuclear Fire
  6. Six Times Dead (16.6)
  7. Angel in Black
  8. Duelo de guitarras
  9. Sign of Fear
  10. Fighting the Darkness
  11. Riding the Eagle
  12. Final Embrace
  13. Metal is Forever
  14. Hands of Time
  15. Seven Seals
  16. Chainbreaker

La sorpresa de la noche nos la dio Alex Beyrodt. En todas las canciones antes del duelo de guitarras los solos los había hecho Henny Wolter, y cuando llegó el duelo pensábamos que el pobre Alex poco podría hacer contra él. Nada más lejos, empezó a tocar tanto o más rápido que Henny pero de una manera muy peculiar: en vez de utilizar la púa rascaba la cuerda con la uña (al menos eso es lo que me parecía que hacía) arriba y abajo logrando un sonido rarísimo y precioso. Fue uno de los momentazos.

Cuando terminaron Metal Is Forever yo pensaba que habían terminado puesto que esa era la canción con la que habían terminado los conciertos anteriores, pero no, quedaba otra sorpresa: tocaron la novedosa Hands of Time, todos sentados en sillas que sacaron, en la que Mat cantó sus partes en solitario estupendamente. Al terminar la canción Ralf dijo señalando a cada uno de los miembros del grupo que tenía sentados a su lado: “Paco, Antonio, muchacho, sombrero… we love Spain!” llevándose una ovación.

Ralf también aprovechó para, al igual que el cantante de Brainstorm, picarnos con que si en Barcelona la gente gritaba más. Y para terminar se despidieron con Seven Seals y Chainbreaker, en esta última nos dejó al público gritar siempre la palabra principal de estribillo.

Así que me fui muy contento con Primal Fear. Aquí dejo los vídeos que grabé (perdonad mi entusiasmo, hay trozos que se me oye más a mí que a Ralf, jaja):

Under the Radar


Nuclear Fire


Six Times Dead (16.6)


Angel in Black


Sign of Fear


Riding the Eagle


Metal Is Forever

1 comentario:

JaviMetal750 dijo...

Acabo de leer en Rafabasa.com una noticia relacionada con este concierto:
Los alemanes JADED HEART se han apeado de la gira que estaban realizando por Europa junto a PRIMAL FEAR y BRAINSTORM. La banda ya se había mostrado bastante descontenta con el trato que estaban recibiendo por parte de los cabezas de cartel PRIMAL FEAR, quienes no les dejaban viajar en su autobús, les acortaron el repertorio en varias ocasiones, y hasta les obligaron a salir antes de que alguna sala abriera sus puertas.